Es considerada la mayor articulación del cuerpo humano, compuesta por tres huesos, fémur, tibia y rotula. Los extremos de los tres huesos donde se tocan están cubiertos de cartílago articular que junto con los meniscos protegen y amortiguan el impacto de los huesos. Para mantener la articulación en su sitio es necesario la participación de los ligamentos, entre los principales se encuentran: el ligamento cruzado anterior, ligamento cruzado posterio y ligamento colatera medial y lateral.
Al ser responsable de soportar la mayor parte del peso del cuerpo en posición de pie, es susceptible a múltiples lesiones; que pueden ser degenerativas (relacionadas con el sobre peso, predisposición genética, deformidades de la rodilla) o traumáticas relacionadas con la actividad deportiva o accidentes donde es mas susceptible las lesiones ligamentarias o meniscales.